Es uno de esos años que ha comenzado con mi primera novela crush.
Sí, no fue planeado pues no suelo planificar mis lecturas, excepto en aquellos tiempos cuando hacía Proyecto Austen, para mi primer blog, Cine, libros y Jane Austen, simplemente escogí La ecuación del amor porque me pareció recordar que, en su momento, había sido popular y que si la tenía en mi biblioteca digital era porque había llamado mi atención. Y, sí, lo cierto es que me enganchó rápidamente y, para mi sorpresa, con tal portada, no se trataba precisamente de un inocente romance entre profesores de secundaria; de hecho me ha impresionado la buena mezcla de romance y erotismo.
Porque Stella es una joven inteligentísima con problemas para relacionarse y sus escasas experiencias sexuales han sido lamentables, pero, tras la presión familiar para tener hijos se ve en la obligación de buscar ayuda en la Web y Michael es el acompañante seleccionado para el trabajo. Ahora, suspendo acá la sinopsis para insertar que cuando la inocente Stella le presenta a Michael el contrato con una serie de requisitos antes de comprometerse a la peculiar relación propuesta, no pude evitar el recuerdo de otro contrato en otra novela de romance erótico. Bien, continuando con lo que va del argumento, me ha gustado que en el segundo capítulo ya vemos venir adónde nos llevará, solo que, para comenzar, y les dejo el suspenso a quienes no la han leído aún y, como yo, no tenían spoilers, quizá, su inexperiencia no sea lo único que Stella oculta.
La ecuación del amor es una novela de romance erótico, escrita por Helen Hoang, ganadora del Goodreads Choice, en el subgénero de romance, del año 2018.
Dato curioso: la inspiración de la novela fue la película Pretty Woman, la autora quería hacer algo al estilo, pero al inverso, en el que la chica fuese la que contratara un acompañante.
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